Tengo el tiempo entre los dientes para ti

Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, y eso que ya no te tengo aquí. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque ya no sea tu risa la que me haga reír. Que bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque sepa que seguramente no te vuelva a ver. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque ya no estás tú para conjugar el presente con el verbo ser. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque el sol a veces no me caliente. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque las heridas que me dejaste todavía están recientes. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque sigo preguntándome día a día el por qué no estás aquí. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque no sepa que haces aún dentro de mí. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, aunque me queme, aunque me duela. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, en como me decías que podía con la tormenta. Qué bueno se me hace a veces pensar en ti, qué bueno, aunque todavía a pesar de todo me gustaría volver a respirar tu aire, qué bueno.